Que los mininos son golosos y que se relamen los bigotes con todo lo que tiene que ver con la leche no es nada nuevo. Pero que generalmente les sienta falta, tampoco lo es. Por eso, tanto ellos como sus dueños acogerán encantados la noticia de que ya hay en el mercado diferentes gamas de postres lácteos pensados para los gatos.

Estos postres les aportan todas las proteínas y vitaminas de la leche, ya que están realizados con leche entera de vaca. Pero se trata de leche con muy bajo contenido en lactosa, por lo que es fácilmente digerible para el gato.

Natillas, yogures o cremas de sabores son un fantástico premio para los peluditos, repliki zegarków que suelen Laser Pointer responder muy bien a los estímulos positivos. Esto hace que las sabrosas recompensas sean una buena manera de convencerles de que se dejen cortar las uñas.

Si cuando les cortamos las uñas a continuación les ofrecemos uno de estos premios, acabarán asociando la recompensa con el corte de uñas y se dejará hacer de mejor grado. Y es que los gatos son sumamente complacientes si se sabe negociar con ellos.

Estos postres son también perfectos para darles alguna medicación, ya que es fácil machacar bien una pastilla y mezclarla con natillas, que al ser ligeramente espesas comerán sin notar que hay un añadido.

Eso sí, si la pastilla es demasiado fuerte de sabor es mejor no hacerlo, ya que se corre el riesgo de que no solo rechace la pastilla, sino que no quiera volver a comer las natillas porque las asocie al mal sabor.

También son estos postres una estupenda forma de socializar al gato, replique montre suisse que se volverá loco por comer un poquito y quizás acceda a dejarse acariciar con tal de saborear un poco de esas natillas, eso sí, siempre sin agobiarlo.

Pero, por encima de todo, estos postres lácteos son un placer para el gato y a todos nos encanta verlos disfrutar como ellos saben hacerlo, relamiéndose todos cuando algo les gusta de verdad.

No debemos de olvidar, no obstante, que estos postres aportan también calorías, por lo que hay que darlos en muy pequeñas dosis o de manera circunstancial, ya que si se dan todos los días podrían hacer que el gato acabara con sobrepeso o con problemas de obesidad.

Cuidar la dieta es fundamental, hacer que disfruten también y en el equilibrio justo está la clave para lograrlo.